Maria Chanlatte

Originaria de la República Dominicana, María Chanlatte se mudó a Estados Unidos en 2012. Al establecerse en la ciudad de Nueva York, se sintió rápidamente atraída por los desafíos que enfrentan las comunidades inmigrantes, una pasión que se convertiría en la piedra angular de su carrera. Durante su estancia en Nueva York, María se dedicó al voluntariado en Catholic Charities, donde colaboró ​​con los procesos de ciudadanía, ayudando a las personas a navegar las complejidades del proceso de naturalización. Además, apoyó a City Harvest proporcionando alimentos a familias necesitadas y trabajó para conseguir más donaciones de alimentos de establecimientos para apoyar así a la comunidad. Defender a los necesitados siempre ha sido el centro de su misión.

Su pasión por los asuntos globales y la justicia social comenzó durante sus años de escuela secundaria en la República Dominicana, donde participó en los programas Modelo de las Naciones Unidas (ONU). Estas experiencias despertaron su interés por la economía y la política global, y la inspiraron a seguir una carrera que le permitiera tener un impacto tangible en la vida de las personas.

Cuenta con una amplia experiencia trabajando con casos humanitarios, incluyendo peticiones VAWA, visas-U, trámites consulares y casos de exenciones que son particularmente significativos para ella. Ha trabajado en varios otros casos de inmigración, desde peticiones familiares y casos de asilo hasta solicitudes de Visas de No Inmigrante (NIV), Ajustes de Estatus y la eliminación de condiciones en la corte. Su experiencia en el manejo de las complejidades de la ley de inmigración ha ayudado a innumerables personas y familias a asegurar un futuro mejor. Su enfoque empático le permite establecer vínculos sólidos con sus clientes, clave para lograr resultados exitosos.

Más adelante en su carrera, María se mudó a otro estado para ampliar sus horizontes y continuar su trabajo de defensa en una nueva comunidad, asegurando que su pasión por ayudar a los demás siguiera siendo su enfoque profesional.

Fuera de su trabajo, es una ávida lectora y amante de la naturaleza, y a menudo disfruta de momentos tranquilos al aire libre, ya sea disfrutando del calor de un día de primavera o viendo cómo se desata una tormenta. También disfruta del senderismo y los viajes, donde se sumerge en nuevas culturas, explora diversas gastronomías y aprende nuevos idiomas.

María habla español, inglés y francés con fluidez, ella siente que aporta una perspectiva global y un profundo aprecio por la diversidad del mundo. Motivada por el deseo de servir y marcar una diferencia significativa, se dedica a ayudar a sus clientes a navegar por procesos migratorios complejos, defender sus derechos y apoyarlos en cada etapa de su proceso.

Idiomas: español e inglés